Hemos cumplido un año de vida funcionando. Sí, un año. Un año que ha dado mucho de sí. De grandes altibajos, ese diente de sierra que en cada fecha del calendario te pone en tu sitio, pero sin dudarlo, con un balance muy positivo. Somos optimistas. Las Cabañas Patagónicas son un alojamiento que se disfruta con calma y con la misma calma tienen que ir creciendo. Igual que la aceptación entre vosotros. Poco a poco se van haciendo grandes y cada día que pasa se van conociendo entre los amantes de la naturaleza y la montaña.

En el año 2006 conocimos Maraña. La casualidad nos trajo a este maravilloso valle perdido en la montaña oriental leonesa. Por aquel entonces dijimos que Maraña era un brillante en bruto, una joya por tallar, un paraje por descubrir, una postal que enseñar y desde luego, la pregunta que nos hicimos entonces, sigue hoy igual: ¿Cómo puede ser que Maraña esté como está?


Nos enseñaron "La Cortina". Nos dijeron que podrían venderla (¡¡algo impensable en estos mundos rurales de dios!!). Jesús de la Riva fue nuestro padrino, nuestro intermediario, y a él le debemos este espectacular enclave ¡¡Muchas gracias Jesús!!
Nos armamos de valor y emprendimos una obra de importacia y con muchos obstáculos, por lejanía y difíciles accesos. Pero aún así, seguimos adelante después de tirar la primera piedra. Sí, la tiramos, no la pusimos. Porque antes de nada tuvimos que tirar un muro ruinoso que no cumplía la normativa urbanística y había que retranquear.


Pasaron meses y meses de obra, de pelea, de estar atento y de disfrutar con la forma que iba tomando el terreno. De lo que surgía de las máquinas y de nuestra imaginación. De lo que tapaba la niebla, bañaba la lluvia y cubría la nieve!!


Lo que fue un campo de hierba fresca y bien abonada para el pastoreo y la recolección de champiñones, pasó a ser un barrizal lleno de catas, agujeros y bases para casas de madera.


Lo que vino a continuación es de todos conocido, cinco casas de madera con espíritu patagónico y orientación montañera. Pilares, vigas y troncos superpuestos uno encima de otro, en perfecto orden y siguiendo las normas constructivas de la madera. Plomo, nivel y sierra, acompañados de lija, brocha y maza. Escavadora, hormigón, tubos y arquetas, todo vigilado por el plano y la mirada fina del controlador.

Os vamos a poner una secuencia de fotografías, tomadas desde un punto lejano, a lo largo de muchos meses de obra. Reflejan el avance de la obra desde su inicio hasta hoy en día.

un saludo y que las disfrutéis!!!!



el 28 y 29 de octubre de 2008, cayó una buena nevada que mantuvo la obra parada unos cuantos días.









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